El aliso es una planta ornamental que se caracteriza por sus pequeñas flores agrupadas y su dulce fragancia. Perfecta para decorar bordes de jardines, macetas y rocallas, esta planta es ideal para quienes buscan un toque de delicadeza y frescura natural en sus espacios. Su capacidad para atraer polinizadores y su fácil mantenimiento la convierten en una elección versátil y encantadora.
Para cuidarla necesitamos: Riego moderado y un sol pleno